Sustracción de menores

Área de Práctica

Secuestro de un menor

El secuestro de un menor es lógicamente una de las experiencias más traumáticas y difíciles por las que un padre o madre pueden pasar, dándose las siguientes modalidades:

  • Sustracción Interparental: Se da este supuesto cuando uno de los progenitores se lleva al hijo consigo, normalmente fuera del país, durante el proceso de separación, o bien, cuando la guarda y custodia del menor ya ha sido atribuida al otro progenitor.
  • Rapto del menor por una persona conocida: Esta modalidad parece tener como víctimas preferentes a niñas, a quienes hacen desaparecer en espacios públicos abiertos, cuando alguno de los progenitores con quien va acompañada no se da cuenta de ello, y suele tener relación con el otro progenitor por cuenta de quien se actúa.
  • Secuestro del menor por parte de un extraño: Como bien fácilmente se puede entender, es la modalidad menos corriente, pero más temida, ya que el secuestro es llevado a cabo por un desconocido. Esta versión es lo que, en lenguaje vulgar, se conoce como rapto.
  • Sustracción Internacional de menores: En este caso el niño es sacado del país donde reside ordinariamente, es decir, donde tiene su domicilio habitual, y es llevado al país de donde es originario normalmente el secuestrador, que suele ser uno de los progenitores, el cual trata de buscar el amparo de la normativa de su país y el favor de sus Tribunales.

Suele darse en el marco de divorcios conflictivos con progenitores de diferentes nacionalidades. En estos supuestos, el menor traspasa las fronteras del país en donde reside y es arrebatado sin el consentimiento del otro.